Kaos en la Red, Tilcara, Jujuy, Argentina-9 de mayo.- Alrededor de 1.500 personas marcharon el jueves desde Juella hasta la Plaza Central de Tilcara en rechazo a la minería a cielo abierto y exploración de uranio y otros minerales metalíferos en la zona. Fueron más de 1500 personas, quienes con banderas Wipala, carteles caseros y ánimos de protesta marcharon bajo el seco sol de Tilcara, pidiendo por el cierre de las contaminadoras mineras de uranio y cielo abierto.
Alrededor de 1.500 personas marcharon el jueves desde Juella hasta la Plaza Central de Tilcara para expresar el rechazo a la minería a cielo abierto y a la exploración de uranio y otros minerales metalíferos en la zona de Juella y Yacoraite.
Mujeres, hombres, niños y jóvenes de los pueblos de Tilcara, Juella, Yacoraite y de las Comunidades del departamento jujeño de Tilcara volvieron a marchar, reafirmando su voluntad de defender la tierra, el agua y el aire de la Quebrada de Humahuaca, luego de que el Tribunal Contencioso Administrativo de Jujuy rechazara el recurso de amparo presentado por los Vecinos Autoconvocados en agosto del año pasado.
El número de manifestantes impresiona, si se tiene en cuenta que el pueblo de Tilcara, cabecera de departamento, tiene algo más de 5.000 habitantes. En la mañana del día de la movilización, los representantes legales de los Autoconvocados presentaron en San Salvador de Jujuy la apelación a ese rechazo ante el Superior Tribunal de Justicia, para que el Juzgado Administrativo de Minas se abstenga de otorgar permisos de cateo, exploración y explotación minera a cielo abierto.
Los vecinos presentarán además una nota al gobernador Walter Barrionuevo; y otra a la Legislatura provincial solicitando la sanción de una ley que prohíba la minería a cielo abierto y el uso de sustancias toxicas en toda la provincia.
Durante el acto desarrollado en la Plaza de Tilcara, representantes de organizaciones e instituciones de la región expresaron de distintas maneras su profundo rechazo a la instalación de empresas mineras en la Quebrada de Humahuaca y la Puna jujeña. Agricultores, ganaderos, comunidades aborígenes, maestros, estudiantes, comerciantes y artesanos dieron testimonio con su presencia y su voz, de la voluntad de continuar con la lucha.
Desde el escenario, donde se ubicaron productos agrícolas autóctonos, como maíces y papas, se recordaron los ya comprobados casos de contaminación minera en nuestra provincia: el plomo y el cinc de las aguas del efluente del dique de colas de Mina El Aguilar; el plomo en la sangre en los chicos de Abra Pampa, y el abandono de las minas Mina Pan de Azúcar, entre muchos otros.
Se mencionaron también otros casos de pueblos de la Argentina que resisten y pelean contra la minería, como los de Famatina, Esquel, Córdoba, Neuquén, Mendoza y San Juan.
Especialmente conmovedora fue la intervención de Don Gaspar, agricultor de Juella, que leyó su Poema al Minero en el que relata con crudeza las consecuencias terribles que esta actividad tiene para la salud de los trabajadores, un tema que fue tocado también por una vecina de Juella cuyo marido tiene problemas de salud por la misma razón.
Los oradores aludieron también a la declaración de Patrimonio de la Humanidad de la Quebrada de Humahuaca por parte de la UNESCO en 2003, algo que fue impulsado por las autoridades provinciales en medio de promesas de desarrollo y progreso, y marcaron la contradicción entre aquella iniciativa y el plan minero que actualmente encara el gobierno provincial, que destruirá el valioso e irremplazable capital natural de la región.
Todos los discursos, al igual que las pancartas, hablaban de la defensa de la vida, de la tierra y del agua, y por tanto de los cultivos y la ganadería que hacen a la vida tradicional quebradeña, y están fuertemente ligadas a la cultura de la tierra y al paisaje. Y tampoco habrá turismo sustentable si la región se convierte en un páramo sucio, estéril y contaminado para siempre.
Con firmeza, el pueblo se pronunció una vez más y advirtió a las autoridades que no permitirá la entrada de ninguna empresa minera en la región, y que detendrá los vehículos si llegara a ser necesario. Numerosos medios locales, provinciales y nacionales –como TN y Crónica TV de Buenos Aires, y los diarios Pregón, Lea y El Tribuno de Jujuy, entre muchos otros– cubrieron las instancias de la movilización.
Con esta masiva marcha se reafirmó el compromiso de nuestras comunidades. No toleraremos la explotación minera en la zona. No permitiremos el saqueo de nuestros bienes naturales. Resistiremos con la fuerza que nos da la defensa de lo nuestro y de los nuestros, de nuestra salud y del futuro de nuestros hijos, de nuestras formas de vida, de nuestra cultura y de nuestra Madre Tierra.
La gran minería a cielo abierto es la peor opción de “progreso” para nuestra provincia, como quieren hacernos creer. Mueve mucho dinero entre pocas personas; contamina el medio ambiente, ahora y para nuestros hijos; usa millones de litros de agua diarios, secando arroyos y napas de agua, perjudicando la agricultura y la ganadería, arruinando definitivamente la vida en el campo y los pueblos de la Quebrada y la Puna.
La marcha desde Juella por la ruta nacional N.º 9 fue acompañada por muchísimos carteles y pancartas, hechos a mano, algunos colgados del cuello de llamas y perros; otros llevados por los chicos. Algunas de las consignas fueron:
“Queremos para nuestros hijos:, tierra, agua y aire libre de contaminación” “Gobierno, queremos ser escuchados. No queremos que toquen nuestra tierra” “¡¡Miles de años, papas, maíz y cultura en peligro!!” “Déjennos vivir con nuestros ganados y sembrados. No a la Mina en Juella” “Defendamos el futuro de nuestros hijos y a nuestra madre tierra, la Pachamama. En Juella No a la muerte, sí a la vida” “Jujuy patrimonio de la contaminación”.
Alrededor de 1.500 personas marcharon el jueves desde Juella hasta la Plaza Central de Tilcara para expresar el rechazo a la minería a cielo abierto y a la exploración de uranio y otros minerales metalíferos en la zona de Juella y Yacoraite.
Mujeres, hombres, niños y jóvenes de los pueblos de Tilcara, Juella, Yacoraite y de las Comunidades del departamento jujeño de Tilcara volvieron a marchar, reafirmando su voluntad de defender la tierra, el agua y el aire de la Quebrada de Humahuaca, luego de que el Tribunal Contencioso Administrativo de Jujuy rechazara el recurso de amparo presentado por los Vecinos Autoconvocados en agosto del año pasado.
El número de manifestantes impresiona, si se tiene en cuenta que el pueblo de Tilcara, cabecera de departamento, tiene algo más de 5.000 habitantes. En la mañana del día de la movilización, los representantes legales de los Autoconvocados presentaron en San Salvador de Jujuy la apelación a ese rechazo ante el Superior Tribunal de Justicia, para que el Juzgado Administrativo de Minas se abstenga de otorgar permisos de cateo, exploración y explotación minera a cielo abierto.
Los vecinos presentarán además una nota al gobernador Walter Barrionuevo; y otra a la Legislatura provincial solicitando la sanción de una ley que prohíba la minería a cielo abierto y el uso de sustancias toxicas en toda la provincia.
Durante el acto desarrollado en la Plaza de Tilcara, representantes de organizaciones e instituciones de la región expresaron de distintas maneras su profundo rechazo a la instalación de empresas mineras en la Quebrada de Humahuaca y la Puna jujeña. Agricultores, ganaderos, comunidades aborígenes, maestros, estudiantes, comerciantes y artesanos dieron testimonio con su presencia y su voz, de la voluntad de continuar con la lucha.
Desde el escenario, donde se ubicaron productos agrícolas autóctonos, como maíces y papas, se recordaron los ya comprobados casos de contaminación minera en nuestra provincia: el plomo y el cinc de las aguas del efluente del dique de colas de Mina El Aguilar; el plomo en la sangre en los chicos de Abra Pampa, y el abandono de las minas Mina Pan de Azúcar, entre muchos otros.
Se mencionaron también otros casos de pueblos de la Argentina que resisten y pelean contra la minería, como los de Famatina, Esquel, Córdoba, Neuquén, Mendoza y San Juan.
Especialmente conmovedora fue la intervención de Don Gaspar, agricultor de Juella, que leyó su Poema al Minero en el que relata con crudeza las consecuencias terribles que esta actividad tiene para la salud de los trabajadores, un tema que fue tocado también por una vecina de Juella cuyo marido tiene problemas de salud por la misma razón.
Los oradores aludieron también a la declaración de Patrimonio de la Humanidad de la Quebrada de Humahuaca por parte de la UNESCO en 2003, algo que fue impulsado por las autoridades provinciales en medio de promesas de desarrollo y progreso, y marcaron la contradicción entre aquella iniciativa y el plan minero que actualmente encara el gobierno provincial, que destruirá el valioso e irremplazable capital natural de la región.
Todos los discursos, al igual que las pancartas, hablaban de la defensa de la vida, de la tierra y del agua, y por tanto de los cultivos y la ganadería que hacen a la vida tradicional quebradeña, y están fuertemente ligadas a la cultura de la tierra y al paisaje. Y tampoco habrá turismo sustentable si la región se convierte en un páramo sucio, estéril y contaminado para siempre.
Con firmeza, el pueblo se pronunció una vez más y advirtió a las autoridades que no permitirá la entrada de ninguna empresa minera en la región, y que detendrá los vehículos si llegara a ser necesario. Numerosos medios locales, provinciales y nacionales –como TN y Crónica TV de Buenos Aires, y los diarios Pregón, Lea y El Tribuno de Jujuy, entre muchos otros– cubrieron las instancias de la movilización.
Con esta masiva marcha se reafirmó el compromiso de nuestras comunidades. No toleraremos la explotación minera en la zona. No permitiremos el saqueo de nuestros bienes naturales. Resistiremos con la fuerza que nos da la defensa de lo nuestro y de los nuestros, de nuestra salud y del futuro de nuestros hijos, de nuestras formas de vida, de nuestra cultura y de nuestra Madre Tierra.
La gran minería a cielo abierto es la peor opción de “progreso” para nuestra provincia, como quieren hacernos creer. Mueve mucho dinero entre pocas personas; contamina el medio ambiente, ahora y para nuestros hijos; usa millones de litros de agua diarios, secando arroyos y napas de agua, perjudicando la agricultura y la ganadería, arruinando definitivamente la vida en el campo y los pueblos de la Quebrada y la Puna.
La marcha desde Juella por la ruta nacional N.º 9 fue acompañada por muchísimos carteles y pancartas, hechos a mano, algunos colgados del cuello de llamas y perros; otros llevados por los chicos. Algunas de las consignas fueron:
“Queremos para nuestros hijos:, tierra, agua y aire libre de contaminación” “Gobierno, queremos ser escuchados. No queremos que toquen nuestra tierra” “¡¡Miles de años, papas, maíz y cultura en peligro!!” “Déjennos vivir con nuestros ganados y sembrados. No a la Mina en Juella” “Defendamos el futuro de nuestros hijos y a nuestra madre tierra, la Pachamama. En Juella No a la muerte, sí a la vida” “Jujuy patrimonio de la contaminación”.
1 comentario:
El Estado Argentino marca el Genocidio más grande de América del Sur por su
criminalidad mediante una planificación estratégica y táctica, racionalidad y distribución de roles a fin de explotar y saquear los recursos naturales en el Norte Argentino, alias “Siberia Argentina”, un producto bio-social. Mediante la contaminación atmosférica, contaminación del agua y contaminación del suelo. El daño que produce el plomo es mayor cuando su absorción es lenta, casi invisible, sin signos y síntomas evidentes en la primera etapa, pero con graves consecuencias posteriores. Al hombre lo han esclavizado al trabajo en las minas, a la mujer la han prostituido, afectan a la fertilidad, a los niños lo han idiotizado. Sus camélidos son reducidos a tiros de bala o destrozados por perros adiestrados; así como el agua contaminada afecta a los cultivos. No tienen un hospital para tratar la contaminación con plomo, tampoco hospital de niños y maternidad infantil. El analfabetismo sigue estando vinculado al hambre, la pobreza y la exclusión. No tienen educación infantil ni universidad nacional. Son analfabetos, que no tienen acceso a las fuentes del conocimiento y son incapaces de producir nuevos conocimientos; como resultado de un genocidio argentino que premeditadamente olvida los principios fundamentales de vida de la Constitución Nacional, y leyes: de educación, de protección integral de los derechos del niño, niña, adolescente y familia; y otras.
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